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Medio ambiente

¿Son las olas de calor marinas la nueva normalidad?

Ha oído hablar del calentamiento marino, pero ¿ha oído hablar de The Blob? Bautizada en 2013 por Nick Bond, un científico del clima de la Universidad de Washington, The Blob era una gran zona de agua anormalmente cálida que se formaba en el Golfo de Alaska. En dos años, la mancha había duplicado su tamaño y se había extendido hasta la península mexicana de Baja California, con temperaturas 2,5 °C por encima de lo normal. En 2016, esta ola de calor empezó a afectar a los ecosistemas de toda la costa occidental de Norteamérica.

El Blob acaba con la cadena alimentaria

La Mancha empezó en la base de la cadena alimentaria y va subiendo. Los efectos de The Blob empezaron a manifestarse en forma de floraciones de algas y especies que normalmente sólo se encontraban en aguas más cálidas empezaron a aparecer en aguas tradicionalmente más frías. El krill y otros peces más pequeños empezaron a desaparecer y las playas se convirtieron en el lugar de descanso de aves marinas muertas. Cuando las ballenas empezaron a cambiar sus pautas migratorias y acabaron apareciendo en las playas, los investigadores pudieron determinar que la culpa era de la ola de calor.

En 2017, los datos mostraron que la población de bacalao en las aguas afectadas por el blog se había reducido en un 70%, un descenso valorado en casi 100 millones de dólares anuales. Tras revisar los datos disponibles, los investigadores determinaron que los efectos de estas aguas inusualmente cálidas llegaron más lejos de lo que se pensaba y, como consecuencia, los peces simplemente se quedaron sin alimento.

¿Dónde está ahora The Blob?

Aunque The Blob ya ha desaparecido y los ecosistemas afectados han empezado a recuperarse, las olas de calor marinas no parecen haber terminado. A medida que prosigue el calentamiento global y cambia la circulación oceánica, los investigadores han descubierto la formación de nuevas zonas cálidas no sólo en el Pacífico Norte, sino también en otros lugares. Esperamos que la investigación de The Blob nos ayude a comprender el impacto de las olas de calor en los ecosistemas marinos y a gestionar mejor estos fenómenos en el futuro.

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