El deterioro de la salud de los peces sigue ilustrando las repercusiones del cambio climático. El aumento de las temperaturas y la sequía no sólo reducen el agua disponible para el hábitat de los peces, sino que aumentan el dióxido de carbono y la acidificación del agua. La vigilancia del agua en tiempo real es fundamental para el futuro de las especies de peces amenazadas por el cambio climático.

Efectos de la sequía en los peces

El aumento de las temperaturas y la reducción del manto de nieve provocan una disminución del caudal de agua, lo que deja a los peces con hábitats más reducidos. En los peores casos, cuando los arroyos se han secado, los peces se ven amenazados por no tener dónde vivir. Cuando los hábitats se reducen, surge una nueva serie de problemas.

La competencia aumenta cuando los peces tienen menos agua disponible para habitar. Las temperaturas más cálidas y el descenso del nivel del agua aumentan el riesgo de que ésta sea de mala calidad. Aunque en los meses de verano es habitual que aumenten los niveles de pH y disminuyan los de oxígeno, las estaciones cálidas prolongadas amenazan el ecosistema durante periodos más largos.

Qué significa para los peces el aumento del dióxido de carbono

El cambio climático sigue amenazando la vida marina, ya que las aguas en las que viven los peces se vuelven cada vez más ácidas. Recientemente, la revista
Nature Cambio Climático
ha publicado una serie de conclusiones sobre las amenazas que plantea la acidificación de los océanos, principalmente su impacto en los peces. El estudio reveló que los niveles elevados de CO2 alteran las respuestas de los peces marinos a las señales sensoriales.

De hecho, el estudio demuestra que el aumento de los niveles de CO2 puede tener numerosos efectos nocivos en los peces, como la pérdida de audición, que los hace más susceptibles a los depredadores. El dióxido de carbono también puede afectar al sistema nervioso de los peces, modificando el modo en que la información llega a sus cerebros. Estos efectos del CO2 podrían afectar a la población total de peces, dependiendo de la rapidez con que las distintas especies puedan adaptarse a sus entornos cambiantes.

La importancia de vigilar la calidad del agua

Mientras seguimos luchando contra las malas condiciones del agua, la vigilancia es más importante que nunca. Conozca los sistemas de monitorización de OD y temperatura en tiempo real de Aquasend. Póngase en contacto con nosotros hoy mismo para obtener un presupuesto.